Si llegas hasta este artículo es porque necesitas, sí o sí, un custom recovery seguramente para hacer un backup, instalar una ROM, las apps de Google o rootear tu terminal. Habrás oído hablar de algunos recovery como TWRP, PhilZ Touch o CWM, pero comencemos por lo básico, ¿qué es un custom recovery?
En cada marca la combinación es distinta, pero si apagas tu dispositivo y realizas una serie de acciones con los botones físicos (en el caso de Motorola se realiza dejando presionado la tecla de bajar el volumen y la de encendido a la vez) aparecerá el bootloader y, mediante él, accederás al al fastboot recovery. No te asustes, los caracteres son diferentes, parece más una consola de comandos clásica que un terminal de última tecnología, pero tranquilo, que este menú ‘oculto’ no encierra peligros si lo usamos con conocimiento de causa.
Como comentábamos, cada fabricante implementa un recovery diferente, pero de forma general estos no nos van a servir de nada si queremos opciones más avanzadas como las que os comentábamos al comienzo del post. Existen varios métodos para instalar un custom recovery, pero, de forma general, podríamos decir que se dividen en aquellos métodos que requieren root y los que no.
Si no eres root:
Si no has rooteado aún tu terminal (proceso que no necesita indispensablemente un custom recovery instalado) te va a tocar conectar tu dispositvo al PC y ponerte a juguetear con la consola de comandos. De nuevo, no te asustes, créeme que no hace falta tener conocimientos avanzados -ni mucho menos- para hacerlo satisfactoriamente.
Lo único que necesitas (aparte del cable USB) es tener los drivers de tu terminal instalados y actualizados. Descarga el custom recovery que desees en la versión de tu terminal (más adelante hablamos de las distintas opciones). Ahora pasamos a la parte más complicada. La carpeta ADB Tools se trata de un archivo (puedes descargarlo aquí) que servirá de puente entre tu Android y el PC. Una vez descargado este fichero e introducido el recovery que has descargado en la carpeta de ADB Tools, apaga tu dispositivo y enciéndelo en el modo fastboot, mediante el que accederás al bootloader. Dentro de la carpeta de ADB Tools en tu PC deberás de presionar la tecla shift (la de la flechita hacia arriba) en tu teclado, a la vez que haces clic derecho con el ratón, seleccionando la opción ‘abrir ventana de comandos aquí’.
Ya dentro dela consola de comandos, escribiremos ‘ fastboot flash recovery nombre_del_archivo_que_contiene_el_recovery.img ‘. Y ya está, ¿ves cómo no era tan complicado?
Si eres root:
Hay varias opciones que van desde descargar las aplicaciones propias de cada uno de alguno de los custom recovery existentes (ahora os comentaré algunos), hasta apps como Flashify que directamente son capaces de instalarnos directamente distintos recovery según nuestras necesidades.
¿Qué custom recovery me recomiendas?
Como siempre, depende. Son varios los factores que me hacen decantarme por uno u otro según la necesidad. Personalmente, en cuanto diseño y funcionalidad, me quedo con PhilZ Touch, sin embargo, me ha dado algunos problemas, por lo que dejé de usarlo hace algún tiempo. Tenemos también la opción de Clock Work Mod (CWM), que la he probado en varias ocasiones pero no me acaba de gustar. Y para el final os dejo el que, a mi juicio, es el mejor de todos: Team Win Project (TWRP). Este custom recovery tiene una gran comunidad a sus espaldas, además de un soporte muy bueno de actualizaciones. Con él podremos hacer decenas de funciones y, además, aún no me ha dado ni un solo problema de compatibilidad.